Blanquita: la película chilena inspirada en el Caso Spiniak

ACTUALIZACIÓN:

La película chilena Blanquita, ganadora del premio Orizzonti a Mejor Guion en el Festival de Cine de Venecia 2022, se exhibe en la Filmoteca de la UNAM.

Por: Carlos Carrizales 

La nueva entrega del director chileno Fernando Guzzoni se inspira en el “Caso Spiniak”, un proceso judicial acontecido en Chile en 2003 en el que el empresario Claudio Spiniak fue acusado de diversos delitos sexuales en contra de menores. La película problematiza un personaje clave del fenómeno; no al protagonista, sino a una testigo: Gemita Bueno, una chica que en su momento resultó pieza fundamental al presuntamente ser una de las menores abusadas, dando santo y seña de tiempos, lugares y nombres de empresarios y políticos involucrados en la red de pederastía.

No obstante, luego de casi un año de tener a la opinión pública chilena en vilo con cada nueva declaración, Gema confesaría a un famoso diario otra verdad: que todo era mentira. Que nunca fue abusada ni estuvo en los lugares que indicó. Que el cura que la respaldaba (y que dirigía el centro de acogida en el que ella vivía), José Luis Artiagoitia, era el artífice de todo. Que la intención era colaborar con la justicia dando la información necesaria para que Spiniak pagara por sus crímenes.

La actriz protagónica, Laura López, interpreta una versión de esa chica. Una versión de ficción, pero que se basa en las declaraciones públicas y registros judiciales, así como en las inquietudes que el director quería retomar para el núcleo emocional de la película.

“Mucha construcción del personaje fue a partir de la observación de mi entorno, de construir un tono en la forma de hablar, de moverse, de la experiencia de vida de personas de distintos estratos sociales y formas de comportarse. Eso me llevó a vivir el personaje desde una verdad lo más sincera conmigo y con la historia”, cuenta López en entrevista con ZoomF7 sobre su proceso histriónico debutante.

La distancia temporal con el caso también era notable. Laura era muy pequeña cuando el caso Spiniak sucedió, por lo que quizás ese espacio entre ella y el fenómeno le permitió acceder a lecturas con más perspectiva sobre todo lo que se movilizó durante el tratamiento mediático y el proceso de justicia, e incluso sobre las razones de Gema Bueno.

Para Laura, la palabra que resume el actuar de su personaje y que utilizó como eje rector de su interpretación fue ‘resiliencia‘. Tanto Gema como Blanquita se ven enfrentadas a presiones de diversa procedencia: de los medios, de las instituciones judiciales, del cura (interpretado por Alejandro Goic) y hasta de sí misma y sus motivaciones, de las que nos enteramos a cuenta gotas y nunca se revelan claramente.

La joven actriz tuvo entre sus manos un papel bastante demandante para ser su primera película. No obstante, su interpretación contenida y nocturna nos remite a una personalidad que vive en el filo de la verdad y la mentira, de lo explícito y lo que se oculta. En esta charla Laura López cuenta sus desafíos principales del personaje, las dimensiones que más le interesaron de Blanquita y su perspectiva sobre lo que la película busca detonar en los espectadores.

Entrevista con Laura López, actriz protagonista de Blanquita